EDITORIAL

MAS LEJOS

“Más lejos, debéis ir más lejos” cantaba hace ya años un joven Lluís Llach señalando una isla griega como meta. “Debes rogar que el viaje sea largo... que dure muchos años... y aprender de los más sabios."  Está claro que la obra social evangélica no hunde sus raíces en las letras del cantautor de Verges -¡lo hace en el Evangelio!- pero algunos de sus versos podrían ser buenos lemas de futuro y continuidad. 

Es muy cierto que hasta ahora se ha hecho mucho y muy bien, pero ahora estamos en un momento social repleto de cambios. Las perspectivas son muy interesantes pero nos conviene estar bien preparados en consonancia con uno de nuestros distintivos: servir con la máxima calidad, con la trascendencia como transfondo. Desde el voluntariado y la humildad, pero aspirando a la excelencia.

Vivimos nuevos tiempos que nos traen nuevos retos. Trabajo en red, políticas de alianzas, más acercamiento a las Administraciones (que aprueban y aplican ya nuevas leyes sociales) y visibilidad. En este nuevo contexto la formación de nuestros diáconos, voluntarios y técnicos será clave. No podemos perdernos oportunidad alguna de conocer mejor la legislación y aplicarla con sabiduría en nuestro ministerio. Será necesario también aumentar nuestra profesionalidad estando presentes allí donde podamos aprender o compartir nuestra labor. Aprovecharlo todo, en definitiva, para ser más visibles y mejorar nuestro testimonio cristiano.

Jesús nunca puso límites a la labor de su Iglesia y el Nuevo Testamento muestra como los pensamientos limitados o localistas no se ajustan a los criterios del Maestro. Debemos movernos con ambición espiritual, distanciándonos del conformismo. ¡Debemos ir más lejos!

Sirviendo juntos,

Daniel Banyuls.